(2008) Politécnico por convicción, pero ahora… por maldita circunstancia (2011)

Estos años, en los que ha pasado mi vida como un tren el cual tiene su camino definido; actualmente la vía en donde se encuentra se ha abierto a un sin fin de ramas las cuales no sé cúal poder tomar para seguir mi camino.

A mi antecesor le ocurrió esto, por tratar de encontrar un destino tan extinto como la vida de él, pues tomó el camino equivocado.

Del “Sueño realizado pero jamás soñado”, su pasión que crecía al pie del valle, empezó a idealizarse que quería ser para poder acercarse más al Quetzalcóatl Naranja, investigó, buscó y reflexionó (la verdad no muy bien, pues lo que él provocó ahora yo lo estoy pagando) que la mejor opción para él sería: El Instituto Politécnico Nacional.

Pobre estúpido, si estuviera vivo me reiría en su cara; estaba tan ilusionado poder obtener una carrera, el bachillerato terminado y poder seguir en una ingeniería (JAJAJAJAJAJAJA…) que ingenuo, no sabía lo que le esperaba en el CECyT N° 3.

Para resumir esta historia les diré: los primeros semestres fueron pasables pero el 3ro le fue insoportable; esta supuesta escuela tiene (pero que jalada) “los mejores maestros a nivel medio superior” (aja… y yo soy Ma Antonieta de las Nieves XD).

Ahora yo, quien está pagando los platos rotos, sé que nunca debí haber llegado a esa escuela, me he resignado pero tengo la gran esperanza de salir hacia adelante en mi camino, terminando el bachillerato y solo estaré de paso ahí, donde nunca estuve y donde nunca estaré.

Que yo me acuerde él nunca estuvo 100% convencido de pertenecer a esa escuela, los típicos correos de cartas cadenas que decían que era del politécnico al principio se los creyó, pero poco a poco se dio cuenta de que esto era solamente un mal juego.

Además para que alguien pueda poder estudiar bien y a gusto no solo es la escuela y los maestros; también una parte muy importante para ello son los compañeros de clase, solo que en ocasiones no resultan ser exactamente eso, sino al contrario, tu solamente eres un extraño más en ese grupo que vino a interrumpir todo.

Por eso hoy estoy enfermo de rabia hacia esta “institución” (si así se le puede decir) porque el sueño que seguí del sujeto muerto nunca le pude ver aunque sea el inicio:

Entro para poder ver que su STC pudiera prosperar en el sentido tecnológico, pudiéndolo recuperar (tal vez no al 100%) de lo que fue en años anteriores; pero en esta p&$%e escuela solo es importaba 2 cosas: los aviones y el mugrebus. Eso era todo lo que importa ahí.

Por eso sin pensarlo 2 veces me arranqué del alma y de mis pensamientos el color guinda tiñéndolos del más obvio color que yo puedo representar: el naranja. Todo teñido de naranja que me sigue a todo lado a donde voy pero no me molesta en absoluto un Dragón Naranja ¿Qué más puede hacer con su color si será por toda la vida?...

De la misma forma las porras se me hacen una verdadera estupidez ¿Cómo puedo amar algo que ni siquiera le toma importancia a mis talentos? ¿Cómo?...

Mi “Estrella Solitaria” se eclipsa entre otras tantas que ni siquiera se deja ver un destello de esta.

Por esta razón esto es todo lo que tengo que decir respecto:

No Soy ni seré politécnico porque aspiro a ser todo un hombre que no será esclavizado.
No Soy ni seré politécnico porque exijo mis derechos de estudiante.
No Soy ni seré politécnico por convicción pero no por circunstancia.
No Soy ni seré politécnico para poder desarrollar mis dones y no ofrecerlo a esta escuela.
No Soy ni seré politécnico porque da = la patria en la que vivo.
No Soy ni seré politécnico porque al hermano no le importa si estás bien o no.
No Soy ni seré politécnico para apagar la antorcha a nombre de la “Patria”.
No Soy ni seré politécnico porque no hay ninguna dignidad para esa “Institución”.
No Soy ni seré politécnico porque mi incierta libertad de joven y estudiante no me da razón para respetar ese “recinto”.
No Soy ni seré politécnico porque traduzco la tricromía de mi bandera como trabajo, deber y honor los cuales he visto que no tiene.

Por eso seré el Dragón por convicción y no por circunstancia…

“El Sueño realizado pero jamás soñado” Pt 3

23 de Mayo por la mañana. Me había levantado temprano para poder arreglarme como se debe, zapatos boleados, traje limpio y planchado, una corbata color mostaza con detalles de Ms del Metro, todo estaba listo para ese día, el día en que iba a formar parte del sistema:

Llegué con toda mi familia a las oficinas de Delicias en donde había estado anteriormente, y ahí varias personas del personal me estaban esperando, me sentía alguien importante, estaba rodeado de los grandes del sistema y fuimos directamente a la misma oficina del director; ahí compartimos diferentes temas que rodeaban al Metro, tanto de trenes, estaciones, datos curiosos y algunas ideas que podrían mejorar este transporte. Fue increíble…

Más adelante desayunamos todos ahí en la sala de juntas, siguiendo con la conversación anterior, y seguido de esto pude conocer el mando central donde manejan todos los trenes por medio de sistemas automáticos llamado PCC (Puesto Central de Control) pero solo vi la segunda parte puesto que solo era de las líneas 6, 7, 8, 9 y B pero era la más equipada y moderna que la primera parte donde se encuentran las demás líneas, es extraño poder imaginar como algo tan sencillo puede resultar verdaderamente complejo, quien lo pudiera imaginar que los trenes están conducidos de esa manera.

Salimos de Delicias caminado rumbo a la estación Balderas de la línea 3, toda la gente se quedaba viendo la caravana de personas que me rodeaban; llegando a la estación esperamos un tren el cual me acuerdo perfectamente que era un NM-79 con la motriz n° 275 el cual me hicieron conducir. Fue agradable conocer esa experiencia de conducir un transporte de grandes dimensiones, ver como llegaba a la estación, activar la apertura de puertas, encender la alarma del cierre de las mismas, asegurarse de que se hayan cerrado bien, e iniciar de nuevo la marcha hacia otra estación, así fue hasta La Raza en donde no sé por qué motivo el tren se detuvo pero fue solo por 5 minutos, y después de eso fue ordinario el recorrido hasta la terminal de Indios Verdes.

Ahí fuimos directamente hacia los talleres de Ticoman donde cambie el traje por el uniforme de talleres con las botas y el casco. Pude observar los trenes en su casa algunos descansando y otros en mantenimiento. No tenía idea de cómo era verdaderamente un tren es su parte interior ni por cuantos mecanismos tienen para funcionar, son unos verdaderos monstruos naranjas. Técnicos que trabajan ahí me explicaron cada uno de los componentes y tuve la oportunidad de accionar una palanca de emergencia, no pude ver toda la función de esta puesto que el tren estaba detenido.

En ese lugar había trenes tanto de la línea 3 como de las líneas 4, 5 y 9, su inspección el en mantenimiento mayor es increíble, tienen que cuidar cada detalle, pero no solo es eso, también a los trenes que tuvieron percances al chocar con otros, vi un MP-68 que le estaban reconstruyendo la cabina; se notaba ya que el color naranja que tenía era diferente al resto del vagón.

Por ultimo fui a una junta (en los mismos talleres) acerca de la rehabilitación de un tren modelo MP-82 con el diseño de una franja gris en las ventanas y también sobre la transformación de varias motrices con cabina del modelo MN-73 a motrices sin esta…”

Es todo lo que me acuerdo, lo demás me resulta borroso…

Hoy solo me hundo en la rabia de ver como todos sus trabajos que él dejó fueron manipulados de una manera tan errónea y otras personas en las páginas sociales se han adueñado de sus maquetas y otros dibujos dándoles crédito a ellos mismos sin saber en realidad quien los realizó y a que detalle de cada uno de ellos.

Todos sur archivo los conservo impresos en una carpeta descuidada, y el libro se ha ido deshojando con el paso de los años.

Aquí mi historia empieza a tomar sentido, ya que aquí ocurrió el primer error y pronto contaré el segundo de los cuales pago actualmente cada día de mi existencia.

“El Sueño realizado pero jamás soñado” Pt 2

Pero se me olvidaba decirte algo; también me preguntó que a qué quería yo dedicarme y contesté diseño gráfico; pero él no quedó muy convencido y me dijo: ̶ ¿Diseño? Tú no estás bueno para eso, tú estás bueno para ingeniero (de qué, no lo sé) y me dije sin estar completamente convencido: ammm, ok…

Fui acompañado de una de las secretarias que me habían visto anteriormente junto con una laptop para mostrar mis archivos (la mayoría la llevaba en formato digital) y yo estaba tanto nervioso como emocionado.

Después de varios minutos esperando (que para mí fueron una eternidad) al fin entramos a la oficina del director general Francisco Bojórquez. Al igual que el licenciado se sorprendió por mis trabajos y conocimientos acerca del tan mencionado transporte; pero de repente entre ellos comenzaron a murmurar algo sobre mí. Mi sorpresa fue cuando me dijeron: Que crees, te vamos a hacer director honorifico de Metro por un día. ¿Qué?... no podía creerlo, llegué a mi casa y les dije a mis papás lo que había ocurrido y toda esa semana fue de ir y venir a varias estaciones para preparar detalles para poder ser director general el 23 de Mayo que venía.

Que ir a Juárez, a Isabel la Católica, ver la talla de traje, el permiso de falta de la escuela, el traje de talleres, qué faltó el casco… las botas, un sinfín de cosas para el gran día…

 

“El Sueño realizado pero jamás soñado” Pt 1

¿Por qué estos recuerdos me han rodeado desde que estoy yo aquí? Yo Dragón tengo recuerdos tan lejanos de aquel sujeto que ya no se encuentra con nosotros, pues fue como un CPU el cual simplemente le quitaron el disco duro y se lo agregaron a un completamente diferente equipo que nadie sabe cuál fue su pasado el cual soy yo pero con toda la información almacenada de los últimos 17 años.

Tengo una reseña de él me contó y me gustaría que la supiesen, tal y como fue y de la boca de él (llanos recuerdos guardados en la carpeta "archivo muerto") para que sepan el porqué de mi vida actual:

"Un día, del mes de mayo… no lo recuerdo bien, era un día en el cual no había ido a la secundaria por ser un día relativamente festivo (día de los maestros) así que decidí ir al Metro a mostrar algunos diseños que había creado en Corel Draw 11 con muy básicos conocimiento en los cuales yo quería que fueran mostrados en la página de este bello trasporte que me encanta mucho.

Eran trenes, tanto de caricatura como maquetas que iban desde el MP-68 (tanto original como en sus rehabilitaciones) hasta el actual NM-02, dibujos, boletos, carteles de aniversario y más cosas que no recuerdo… Ya había ido en repetidas ocasiones pero solo obtenía carteles de los 35. 36 y 37 aniversario pero nada más, pero esta vez fue diferente…

Había ido donde es el área de imagen institucional del STC (estación Juárez), pero no estaba el licenciado que iba a atenderme (estaba en junta) así que me dijeron que me podría esperar, y así fue; alrededor de 2 horas y media después dos secretarias que ahí se encontraban se extrañaron de mi presencia puesto que había esperado todo ese tiempo para ver si alguien me atendía y se acercaron a mí diciéndome:

̶̶ Hola, ¿qué estás haciendo aquí?̶ me dijeron y les respondí
̶ esperando al licenciado que me dicen que no tarda en llegar.

En ese momento les dije que venía porque quería que mis archivos fueran publicados y les mostré las maquetas que realicé en papel (eran para imprimir y armar), y al asombrarse de los trabajos que había hecho ya que solamente tenía 12 años se dijeron entre ellas:

̶ ¿Y si lo llevamos con el licenciado Souza? ̶ . Yo que quedé con la idea {ahora que fue lo que hice} así que me llevaron a una sala de juntas, una de ellas se retiró y la otra había ido por el mencionado licenciado quedándome solo en esa sala y con un poco de ansiedad.

Escuché abrirse la puerta algo fuerte y de repente escucho una voz un poco molesta que dice: A ver, ¿qué tenemos aquí? yo me asusté un poco puesto que la persona que había llegado estaba muy molesta de no sé qué cosa, pero al ver mis trabajos, me pregunto que eran y porque estaba yo ahí; y le conté la misma historia que a las secretarias, pero como no solamente había llevado esos trabajos e imágenes también tenía mucha información guardada del STC pero en la mente. Me llegó a preguntar varias cuestiones acerca de este transporte las cuales le contesté sin demora, sorprendido por esto el licenciado me regaló un libro llamado: El Metro de la Ciudad de México, y hasta lo enojado se le quito; al darme ese libro de dijo una cosa:

̶ ¿Te gustaría conocer al mero mero de aquí? ̶

Yo con timidez le dije que sí. Así que sin pensarlo 2 veces salimos rumbo hacia la calle de Delicias (detrás del Metro Salto del Agua) en donde se encuentra el centro del organismo…

El Metro: Un espacio para la Vida y también para la Muerte

Todas las cosas tienen su hora de comienzo pero también la hora de su fin.

 Todos los días vemos en las calles que le gente nace, que la gente vive, que la gente muere; pero no solo lo vemos ahí, sino también en ese lugar tan cotidiano de donde es una ciudad, sobre esa oscuridad perpetua en donde se escucha solo el eco de rugido de Dragones, pues me refiero… en el Metro.

 Este es un lugar donde miles de miradas se cruzan entre largos pasillos de mármol y tonalidad naranja, donde uno se puede encontrar desde una madre cargando a su hijo de brazos en el lugar reservado para ella, hasta la tierna pareja de abuelitos sentados uno al lado del otro viajando plácidamente en los tradicionales asientos (tanto verdes como azules) pares.

 Todo esto es un mundo con un sin fin de contrastes, tanto que pareciera que una flor nace pero al mismo tiempo muere, todo esto, los 365 días del año.

Nuestro Metro, ha sido testigo mudo de muchos acontecimientos como estos; es curioso como una usuaria está en camino hacia un hospital para aliviarse, pero de repente comienzan a ocurrir las contracciones y la ordinaria estación de este transporte se convierte en la sala de partos y los policías que se encuentran ahí se convierten en los parteros para recibir a esa bella criatura :).

También en este lugar llega a pasar una situación que llega a resultar dolorosa: la muerte, pero… hay ocasiones en las cuales esta llega inesperadamente y no intencionada; muchas personas que ya no pudieron ver más hacia adelante su única solución que tienen es arrojarse al camino del Dragón Naranja y este no lo puede evitar pero otras personas que se encuentran sobre los pasillos esperando a este, en el momento menos esperado llega la muerte súbita.

 Pero como dice un dicho: “Ahí nos toco nacer, nos tocó vivir y nos tocó morir”